Alguien me preguntó por qué siendo una persona tan alegre escribo cosas "tan tristes". "¿Me define lo que escribo?", pensé. Hoy me (te) respondo: No soy sólo lo que escribo. Ni lo que callo. Ni lo que grito. Ni lo que vivo. No soy la melancolía que me abraza tantas noches. Ni la nostalgia que …
Sigo
Ha pasado tanto tiempo desde la última vez, que ya no recordaba qué era sentir un pozo lleno de miedos acurrucado en el pecho. Llevo con él semanas y aún no me acostumbro a su peso, ni su aliento. ¿Cómo acostumbrarse a una presencia que crece?, me pregunto. Hasta ahora no había sido capaz de …
Abandonar la tristeza
Cuando la vi de pie, apoyada en la pared, mirando hacia arriba, le pregunté si era feliz. Me miró con el cielo azul escondido en sus ojos y salió corriendo en dirección contraria. No sé si se fue en busca de la felicidad o si la encontró conmigo un instante y entonces huyó. A veces …
Te (no) siento
Han pasado ya doscientos días y aún no puedo decir(me) que te (no) siento como a las moscas sobre la ropa. Pero has de saber, amor de ayer, que me han vuelto a salir flores del ombligo y que no fueron necesarios ni tu boca, ni tus besos
Días de esos
Hay días en los que le pierdo la pista al olvido y las cicatrices de mis recuerdos se vuelven mapas de ciudades nuevas; Días en los que siento las plantas de los pies tan infinitas y limpias como el cielo mediterráneo en un día sin nubes; Días en los que los silencios me suben del …