El 15 de abril de 1912, el legendario transatlántico partió desde el puerto de Southampton, entonces el más grande de Inglaterra, rumbo a la ciudad de Nueva York con más de 2.000 pasajeros. Cuatro días más tarde, al chocar con un iceberg al sur de las costas de Terranova, una isla al nordeste de Norteamérica, el barco naugragó y más de 1.500 personas murieron. Hoy, después de un siglo y después de haber revivido el suceso con la película del canadiense James Cameron en 1997, se reaviva por tercera vez la tragedia con el Balmoral, con la nueva película en 3D y con varias exposiciones y actos conmemorativos en diferentes países del mundo.
Hace 9 días, el 8 de abril, desde el mismo puerto de Southampton, el Balmoral zarpó del puerto con 1.309 pasajeros para revivir durante 12 días el viaje que hizo el Titanic. El barco salió dos días antes de cuando lo hizo el Titanic para poder llegar en la madrugada del 15 al lugar donde ocurrió la tragedia. Los tiquetes del tour, organizado por Miles Morgan Travel, fueron vendidos desde hace dos años a pasajeros de 28 nacionalidades diferentes.
“Me parece muy hermoso poder estar en la tumba de mi bisabuelo justo cien años después”, afirmó Susie Millar, bisnieta de Tommy Millar, uno de los constructores del “Titanic” que en aquel entonces tenía 33 años.
A bordo –donde se escucha la misma música que hace 100 años- se hicieron conferencias sobre la historia del transatlántico más sonado de la historia. En la madrugada del 15 de abril –cuando el Balmoral se encontraba en el mismo lugar donde hace un centenar de años murieron miles de personas, cuyos restos fueron encontrados años después, en 1985- se celebró un acto en recuerdo de los fallecidos.
Desde Nueva York, al otro lado del océano, también partió un crucero con 440 pasajeros hacia el lugar donde se hundió “El Titanic”. En el Journey, operado por Azamara Club Cruises, también hubo exposiciones sobre la vida a bordo del Titanic. Ambos barcos pasaron por Halifax, Canadá, ciudad donde están enterradas muchas de las víctimas.
El 10 de abril, en la terminal Ocean del puerto de Southampton se congregaron cientos de personas a la misma hora que el Titanic tuvo hace 100 años programada la hora de salida, a mediodía, para hacer un minuto de silencio y recordar solemnemente el acontecimiento. Los asistentes, muchos de ellos descendientes de los pasajeros fallecidos, arrojaron flores y coronas a las aguas donde el navío de White Star soltó amarras. La ceremonia en el muelle terminó con el himno «Nearer my God to thee» (Más cerca de ti, Dios) pues, según dicen, ésta es la canción que interpretaban los músicos del Titanic mientras éste se hundía.
En Southampton también se inauguró el museo SeaCity, que tiene una sección permanente dedicada al transatlántico y cuyo objetivo es relatar la “historia no contada” de los muchos habitantes de allí que murieron –que fueron la mayoría- y del impacto de la tragedia en cientos de familias de la ciudad.
«Queríamos contar la historia de Southampton y el Titanic, sobre todo la historia de su tripulación, ya que nunca antes ha sido contada», explicó Maria Newbery, comisaria de la exposición.
En este contexto, la ciudad de Nueva York también se sumó a la conmemoración con «Titanic a los 100, mito y recuerdos», una exhibición realizada en el museo marítimo South Street Seaport donde se encuentran elementos interactivos, documentos originales, fotografías de época del barco y mensajes telegrafiados por radio de la noche del suceso.
En Connecticut, uno de los 50 estados de Estados Unidos, también fue realizada una exhibición en el acuerdo de Mystic, organizada por la Fundación de Investigación Submarina. “A 3.800 Metros de Profunidad” sumerge a los visitantes al fondo del Atlántico del norte y revive la emoción que sintió en su momento Robert Ballard cuando descubrió los restos del Titanic, 73 años después del hundimiento. «Brindamos una ortunidad única, porque nos centramos en el descubrimiento, mostrando material inédito que registra ese momento mágico de 1985, cuando me convertí en la primera persona en ver el Titanic después de que se hundiera», explicó Ballard.
Este mes, la segunda película más taquillera de la historia del cine –superada sólo por Ávatar- regresa a la pantalla grande con la nueva tecnología: en 3D. El filme, protagonizado por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, llegará con la intención de estremecer al mundo entero por tercera vez con la misma historia: el naufragio del Titanic.