Sigo

Ha pasado tanto tiempo desde la última vez, que ya no recordaba qué era sentir un pozo lleno de miedos acurrucado en el pecho. Llevo con él semanas y aún no me acostumbro a su peso, ni su aliento. ¿Cómo acostumbrarse a una presencia que crece?, me pregunto. Hasta ahora no había sido capaz de …